Aumentan los ataques de ‘Sextorsión’ a través de Whatsapp

El aumento de los chantajes sexuales en la red es cada vez más preocupante. Aplicaciones como Telegram o WhatsApp, ligadas a la generalización del acceso a Internet, suponen un aliciente para los cibercriminales que, cada vez ven este tipo de conductas como una manera sencilla de conseguir dinero.

La sextorsión se basa en el chantaje. Y como tal, en el miedo. Miedo a que una foto o vídeo de contenido sexual o comprometedor vea la luz, afectando directamente a la privacidad y reputación de la víctima.

Los expertos de Panda Security indican que este tipo de prácticas son muy populares y lo más probable es que el cibercriminal ni siquiera tenga tales fotos o vídeos comprometedores. Puede que esas fotos y vídeos existan pero también es muy probable que todo sea un engaño y que el cibercriminal no tenga nada en absoluto y lo único que busque es alguien que caiga en la trampa.

Estas campañas son enviadas en masa y exigen rescates bajos, que rondan los 400 y 2.000 dólares por lo que muchos usuarios prefieren asumir el pago y olvidar el asunto. Sin embargo, tal y como ocurre con el ransomware, realizar el pago no asegura la recuperación de los datos, nada más lejos de la realidad.

Por eso, para evitar este tipo de amenazas, lo mejor es no practicar «sexting», es decir, no intercambiar fotografías o vídeos de tipo sexual para evitar posible chantajes. Si aún así sufrieran un ataque de este tipo, la clave, como casi siempre, está en saber cómo actuar: «Si se recibe un email de este estilo, hay que hacer rápidamente tres acciones: lo primero es cambiar la contraseña de la cuenta de email. Lo segundo es modificar todas las claves de acceso a las redes sociales y otras cuentas, especialmente si se estaba usando las mismas que en el email atacado. Por último, pero igual de importante, avisar a la Policía de que se ha sido víctima de este chantaje, aunque no hayamos caído en el engaño», aconseja Hervé Lambert, Global Consumer Operations Manager de Panda Security.

En este sentido, desde Panda Security aseguran que los ataques por «sextorsión» han aumentado drásticamente en 2018 y que este tipo de chantaje seguirá creciendo y afectando, cada vez más, a dispositivos móviles.

Además, los expertos vaticinan que el próximo paso serán las «apps» de mensajería instantánea como WhatsApp o Facebook Messenger, dejando de lado el email. Y es que, «la existencia de los ‘group links’ en WhatsApp (aplicaciones disponibles en las tiendas oficiales que permiten a los usuarios unirse a miles de grupos abiertos) facilita mucho la labor a los cibercriminales para contactar con personas de forma directa o para crear sus propias bases de datos de números de teléfono de usuarios de este tipo de chats», explican desde Panda Security.

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